martes, 6 de agosto de 2019

Una vida cristiana equilibrada, sin extremos, sin excesos

El hombre es un ser que, en cualquier área de su vida, tiende a tomar partidos y a irse a extremos. Cuando nos dejamos llevar por nuestra mente, nuestras experiencias, nuestro pasado o nuestro dolor, buscamos evadir a toda costa ciertos pensamientos y ciertas verdades para tratar de sentirnos más cómodos, más dignos, más felices, o más perfectos. 

Hay un dicho común que dice que “todo en exceso es malo” y la Biblia tiene un ejemplo claro. La miel es buena y Dios nos dice que la comamos (Proverbios 24:13). Debemos comer lo que nos baste o sea suficiente, ya que el exceso de ella puede hastiar (Proverbios 25:16). No es bueno comer más miel de lo debido (Proverbios 25:27)



Fishing for Souls, por Adriaen Pietersz. van de Venne, 1614
La religión también tiene muchos ejemplos: fariseos vs. saduceos, católicos vs. protestantes, calvinistas vs. arminianos, bautistas vs. pentecostales, conservadores vs. liberales... y podríamos seguir, pero no tendríamos espacio para indagarlos todos y sus respectivas viceversas. En mi artículo "La Reforma que necesita el cristianismo" hice mención de las doctrinas que han causado mayor división en la historia del cristianismo, y cómo nos han dividido en denominaciones y grupos religiosos que, muchas veces, aunque supuestamente digan basarse en la misma Biblia, realmente a veces llevan por caminos muy distintos y hasta contrarios que sería imposible armonizar (como lo es en el caso del ecumenismo moderno). ¿Pero qué pasaría si, en muchos otros casos, realmente no fuesen caminos contrarios, sino extremos complementarios, como sugería en el artículo sobre los dos lados del mensaje de la Biblia?

Es indiscutible que en muchas iglesias cristianas, a menudo hay un énfasis en un lado de la realidad espiritual, más que en otra. Es común que en el cristianismo moderno se encuentren iglesias donde se pone más énfasis en lo más “positivo”, que en lo “negativo”. Es común ver congregaciones donde parece que la gente es feliz escuchando un evangelio rebajado o diluido con el agua de la opinión popular; donde nunca se desafía al público, y donde se busque que cada uno de los que asistan se sientan con la mayor comodidad posible. Muchos allí se centran más en ofrecer perdón, que en ofrecer santidad y justicia; se limitan a hablar de la obra que hizo Jesús en el pasado, sin atender a la obra que nosotros debemos hacer por Él en el presente, guiados por la justicia y la obediencia a Dios. 


En otras iglesias, por el contrario, el evangelio se presenta como si éste fuera la carga más dura y difícil de sobrellevar. El énfasis es en "todo lo malo", y muy poco de lo bueno: o sólamente en lo que bueno de ellos mismos, y en todo lo malo de los demás. No es raro escuchar de la existencia de lugares religiosos guiados por líderes legalistas y rigurosas doctrinas, reglas fariséicas y protocolos humanos que terminan haciendo que la gente allí se sienta casi todo reprendida y/o lastimada; donde muchos se sientan los más miserables del mundo, y les cueste trabajo al final creer que Dios pueda perdonarlos, por causa de sus errores. Muchos allí se sienten faltos de fe porque su religión, denominación o grupo religioso se limita a ver más el infierno, el pecado y el diablo mismo, que a encontrar el cielo, el amor y al Espíritu Santo obrando en la Tierra en la vida de los creyentes.

La Palabra en su consejo completo no es desequilibrada ni se queda en un extremo u otro; son sus intérpretes y maestros los que tienen (o tenemos) el peligro de caer en un desbalance si no la recordamos en su completitud equilibrada. No se pueden dejar de considerar las verdades bíblicas en su totalidad, sin comparar lo espiritual con lo espiritual, y es necesario hallar un equilibro de doctrinas para poder tener, conocer y practicar un Evangelio bíblico y conformarnos a nosotros y a otros como discípulos maduros en Cristo Jesús. Si el mensaje completo no se predicara, se estaría cayendo en el peligro de mutilar la palabra o de no representar el Evangelio verdadero como tal y de promover una imagen falsa de lo que realmente enseña la Palabra en general. Y la revelación en Apocalipsis 22:18-19 nos enseña del peligro de mutilar o adulterar el mensaje de las Escrituras.

Si un detalle o una parte esencial del mensaje se elimina, los posibles malentendidos serán muchísimos y el tropiezo para muchos será potencialmente grande. Si todo lo que se predica es el cielo, hay un error serio. Si todo lo que se predica es el infierno, hay un error serio. Y sin embargo, lamentablemente muchos creyentes tienen una tendencia a centrarse solamente en la parte "suave", y otros tienden a centrarse solamente en la parte "dura" del mensaje, cuando realmente siempre debemos buscar y predicar ambas partes y tener un balance doctrinal bíblicamente equilibrado. No queremos usar el nombre de Dios en vano, ni que el nombre de Dios sea blasfemado por culpa de nuestros actos (Romanos 2:24).

Para evitar dar mal testimonio y ser de tropiezo a otros, la obra de Cristo y la Palabra de Dios deben ser cosas proclamadas y aceptadas en su completitud, simultáneamente, y nada de la verdad eterna deberá de silenciarse si queremos ser cristianos maduros y buenos siervos en Él en vez de ser hallados como mentirosos o falsos maestros. Hay muchas doctrinas y prácticas en la iglesia, pero ambos lados de la Palabra deben ser predicados y comprendidos juntamente porque Jesús, que es nuestro ejemplo a seguir, es tanto Cordero como León, no sólo uno de ellos.



Por esto compartimos en esta ocasión los 30 puntos de equilibrio que a nuestra consideración o interpretación, debemos encontrar en la vida cristiana, como seguidores de Jesús, como embajadores de Cristo en la tierra, como líderes de nuestras iglesias, servidores, predicadores, ministros, misioneros y maestros de la Palabra. Si sientes que algo está faltando recordar, practicar, creer o predicar, esperamos que Dios te muestre, te recuerde o te enseñe lo que necesites y sea su voluntad y los comentarios son bienvenidos.


30 puntos de equilibrio en la vida cristiana

LO SUAVE O FÁCIL LO DURO O DIFÍCIL
1 Tener presente que Dios es amor, y conocerlo como el Dios amoroso y compasivo que es. Tener presente que Dios es justicia, y conocerlo como el Dios justo y santo que es.
2 Recordar el amor de Dios, confiando en su perdón Recordar la santidad de Dios, obedeciendo su palabra
3 Predicar la gracia y la misericordia de Dios hacia el hombre, lo cual incrementa nuestro gozo y afirma nuestro gozo como hijos de Dios Predicar el juicio y la ira de Dios contra el pecado, lo cual nos lleva al arrepentimiento con la tristeza de Dios, y nos recuerda nuestro deber de seguirle y no seguir pecando para no ser igual que como fuimos
4 Confiar en que su gracia perfecta perdona nuestros errores Permanecer en su llamado irrevocable, siempre siendo fieles a Él
5 Ser libres de la enfermedad, hablando del poder de Dios, las señales, prodigios y milagros que Él prometió que puede hacer a través de la fe y la certeza de sus promesas Ser libres del pecado, hablando del llamado de Dios, de las cadenas, de toda maldad de las adicciones que Él puede romper a través del arrepentimiento y la obediencia
6 Procurar la sanación física, el bienestar del cuerpo, el bienestar terrenal Procurar la sanidad espiritual, el bienestar del alma, el bienestar eterno
7 Recibir sus bendiciones terrenales con gratitud Buscar sus bendiciones espirituales con esfuerzo
8 Recordar nuestros derechos como hijos de Dios que hemos recibido las promesas de tener todo lo que necesitemos Recordar nuestros deberes como siervos de Dios que hemos recibido las órdenes de guardar todas sus enseñanzas
9 Aprender de sus enseñanzas continuamente y recibir diariamente palabra que venga de lo alto Compartir sus enseñanzas continuamente y dar diariamente la palabra que venga de lo alto
10 Hablar de su verdad (declarar nuestra confianza en ella) Hacer su verdad (ponerla por obra)
11 Predicar en base a su palabra Actuar en base a su palabra
12 Leer o escuchar de su verdad en la Biblia Hablar o escribir de su verdad en la vida diaria
13 Recordar que Él nos ama Recordar que Él ama a los demás
14 Ser humilde ante Él Ser humilde ante el prójimo
15 Ser sincero ante Él Ser sincero hacia el prójimo
16 Crecer en conocimiento, estudiando sus palabras Crecer en obediencia, imitando sus obras y dando buen fruto
17 Creer por fe (teniendo una correcta doctrina o teoría) Actuar por fe (teniendo una correcta práctica o actitud)
18 Hablar con Dios en la oración Escuchar a Dios en la oración
19 Recordar que Él nos ha elegido Recordar que Él también nos da a escoger
20 Recibir gustosamente todas las bendiciones de su parte Dar gustosamente nuestras bendiciones de su parte
21 Predicar las palabras de la cruz de Cristo Hacer las obras de caridad que mandó Cristo
22 Darle pan a los hambrientos y sedientos Darle la Palabra de Dios a los hambrientos y sedientos
23 Recibir la Palabra de Dios Enseñar la Palabra de Dios
24 Mantener una relación personal con Jesucristo Ayudar a otros a ser discípulos de Jesucristo
25 Recordar sus promesas de salvación por gracia a través de la fe Recordar sus advertencias de juicio por causa del pecado e incredulidad
26 Recordar que Él recompensará a sus redimidos y siervos Recordar que Él castigará a los pecadores y desobedientes
27 Orar por uno mismo conforme a la voluntad de Dios Orar por los demás conforme a la voluntad de Dios
28 Buscar a Dios en tiempos malos o en tribulaciones Buscar a Dios en tiempos buenos y en momentos agradables
29 Buscar a Dios en nuestras “grandes” decisiones Buscar a Dios en nuestras “pequeñas” decisiones
30 Escudriñar las Escrituras y creer en las enseñanzas de la Biblia, aprendiendo de su significado y conociendo cada vez más Pedir la guía del Espíritu Santo y esperar en su revelación, aprendiendo a escuchar su voz y obedeciendo cada vez mejor
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domingo, 14 de julio de 2019

¿Alabar o Adorar? Significados y Diferencias


ALABAR, del latín tardío "alapari", significa manifestar aprecio o admiración por algo o por alguien, poniendo en manifiesto sus cualidades o méritos. esto es, honrar a Dios públicamente con palabras o con cánticos  (véase Salmos 7:17, Salmos 28:7). Asimismo, implica elogiar y celebrar a Dios con palabras, reconocer los actos justos y poderosos que Él ha hecho en nuestras vidas, o incluso reconocerle por lo que Él ha permitido, las bendiciones o pruebas justas que Él nos ha dado o traído, contando Sus maravillas y su fidelidad (Salmos 9:1); expresar con pasión, estima y veneración lo que Él ha hecho por nosotros a nivel personal, hablando hacia Él anunciando Su nombre entre personas o en medio de la congregación (Salmos 22:22); venerarle y celebrarle con oraciones. Los ángeles y ejércitos celestiales son llamados a alabar a Dios (Salmos 89:5; 103:20; 148:2). Todos los habitantes de la tierra deben alabar a Dios (Salmos 138:4; Romanos 15:11).  Podemos alabarle con canto (Isaías 12:5; Salmos 9:11), con gritos de júbilo (Salmos 33:1; 98:4), danzando (Salmos 150:4), y con instrumentos musicales (1 Crónicas 13:8; Salmos 108:2; 150:3-5), o simplemente al hablar de Él y sus atributos confesándole en público, con gozo, con gratitud por lo que Él ha hecho,  con bullicio o con euforia, sin inhibición y sin pena. Él es digno de alabanza por las obras que Él ha hecho (Salmos 18:3). Jesús dijo que si la gente no alababa a Dios, incluso "las piedras clamarían" (Lucas 19:40). 

ADORAR:  Entregarnos a Dios, darle todo nuestro ser a Dios, rendir todo a Él, confiar todo a Él, dejar todo lo demás de lado mientras le glorificamos (sin importarnos lo que otros digan de nosotros o cómo lucimos o cómo nos escuchamos), enfocándonos sólo en Él y presentando nuestros cuerpos como sacrificio viviente ante Él (Romanos 12:1). Entregar todos nuestros sentimientos y pensamientos hacia Él con toda nuestra fuerza, con toda nuestra mente y con todo nuestro corazón, con libertad espiritual sin restricciones o tradiciones impuestas por el hombre, y con toda confianza de acercarnos a su trono de gracia. Jesús dijo que Dios es Espíritu, y aquellos que le adoran, le adoran en espíritu y verdad (Juan 14:23), esto es, con una vida espiritual apropiada, guiados por el Espíritu de Dios, y hablándole a Él con sinceridad de corazón, sin fingimiento, intencionalmente, genuinamente, con autenticidad y en serio, reconociendo las verdades de la Escritura y la visión, teniendo hambre de Él y anhelo de estar cerca de Él, no meramente por lo que Él da y por lo que Él ofrece a cambio, sino por lo que Él es. Adorar en espíritu verdad también es reverenciar, homenajear y rendir culto a Dios con un corazón humilde, con temor, con extrema pasión. La adoración se centra en hablar o glorificar a Dios (declarar su grandeza), declarar Su naturaleza, Su poder, Su autoridad, Su supremacía, sus mandatos, sus estatutos, sus caminos, sus demandas y todos los atributos que le caracterizan. La adoración requiere derramar nuestro corazón en acción de gracias y en admiración, deleitarnos en Él, negarnos a nosotros mismos y no enfocarnos en nosotros mismos, rindiendo cada parte de nuestras vidas a Su control y Señorío.

miércoles, 17 de abril de 2019

Frases de Fe y Confianza en Dios

A veces Dios no cambia tu situación de inmediato
porque primero está tratando de cambiar tu corazón.

A veces la vida de fe implica decir "no entiendo, pero creo".

Aguarda en Jehová, esfuérzate y aliéntese tu corazón.
Sí; espera en Jehová. (Salmos 27)

Al justo no le sobrevendrá ningún daño,
pero al malvado le cubrirá la desgracia (Proverbios 12:21)

Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas
y que tengas salud, así como prospera tu alma (3 Juan 1:2)

Aunque afligido yo y necesitado, Jehová pensará en mí.
Mi ayuda y mi libertador eres Tú, Dios mío; no te tardes (Salmos 40:17)

Aunque mi camino no sea fácil, yo camino con Dios, y sé que triunfaré.

Aunque tú no siempre te acuerdes de Dios, Dios siempre se acuerda de ti.

Bienaventurados los que no vieron y creyeron (Juan 20:29)

Busca más allá de ti... Tu fe y no tu sentir, y hallarás la fortaleza; y te levantarás con alas de águila al recibir Su fortaleza. — Nancy Ávila

Cada experiencia que Dios nos da, cada persona que Él pone en nuestras vidas, es la preparación perfecta para el futuro que sólo Él puede ver —Corrie ten Boom

Cercano está Jehová a todos los que le invocan.
A todos los que le invocan de veras. (Salmos 145:10)

Ciertamente ninguno de cuantos esperan en ti será confundido.
Serán avergonzados los que se rebelan sin causa (Salmos 25:3)

Como aquél a quien consuela su madre, así los consolaré
yo a ustedes... y verán y se alegrará su corazón y sus huesos reverdecerán como la hierba y la mano de Dios para con sus siervos será conocida. (Isaías 66:13-14)

Como el padre se compadece de los hijos,
se compadece Jehová de los que le temen (Salmos 103:13)

¿Confías en mi cuando mi respuesta es que esperes?
Con él está el brazo de carne, mas con nosotros está Jehová nuestro Dios para ayudarnos y pelear nuestras batallas (2 Crónicas 32:8)

Con su amor, Él calmará tu alma y quitará todos tus temores.

Creer lo hace posible. Tener fe lo hace real.

Cuando el hombre cayere, no quedará postrado,
Porque Jehová sostiene su mano. (Salmos 37:24)

Cuando Jesús está en la barca, no importa el tamaño de las olas.
Cuando llevamos nuestras cargas a Dios y ponemos nuestros problemas en sus manos,
Él no siempre quita nuestros problemas de inmediato, pero promete poner Su paz en nuestros corazones y darnos la solución, tarde o temprano [Filipenses 4:6]

Cuando no puedo leer, cuando no puedo pensar, incluso cuando no puedo orar, puedo confiar —J. Hudson Taylor

Cuando pases por las aguas profundas, yo estaré contigo (Isaías 43:2)

Cuando sientas que ya no puedes más, mira a Jesús y esfuérzate un poco más —John Piper

Cuanto más sabes que Dios está contigo, menos importa quién esté contra ti (Romanos 8:31)

Deja que tu fe sea más grande que tus miedos Diga el débil: fuerte soy (Joel 3:10)

Dios abrirá un camino donde no lo hay.

Dios es más grande que cualquier problema que podamos llegar a enfrentar.

Dios es mi roca en medio de la tormenta.

Dios está trabajando en algo, o de lo contrario el diablo no estaría peleando tanto en contra. ¡Ganarás!

Dios no busca personas de gran fe.
Él busca personas ordinarias que confíen en Su gran fidelidad. — J. Huson Taylor

Dios no busca personas perfectas.
Él perfecciona a las personas que le buscan.

Dios no es hombre para que mienta ni hijo de los hombres para que se arrepiente;
Él dijo, ¿y no hará? Habló, ¿y no ejecutará? (Números 23:19)

Dios no suele dar sueños que encajen en tu presupuesto:
Él no está revisando tu cuenta de banco; Él revisa tu fe.

Dios nunca abandona, y nunca deja solos a sus soldados en medio de la batalla.

Dios nunca ha fallado y no lo hará (Hebreos 13:5)

Dios nunca nos enfrenta a circunstancias que Él no pueda manejar.

Dios quiere abrir el mar para ti, pero antes necesitas creer.
Dios tiene en sí mismo todo el poder para defenderte, toda la sabiduría para dirigirte, toda la misericordia para perdonarte, toda la gracia para hacer tu vida abundante, toda la justicia para revestirte, toda la bondad para proveerte, y todo el gozo para coronarte. —Thomas Brooks

Dios tiene poder de cumplir lo que promete (Romanos 4:21)

Dios tiene una clave para todo problema; una luz para cada sombra, un alivio para toda tristeza
y un plan para cada mañana.

Dios transforma orugas en mariposas, arena en perlas y carbón en diamantes. Usando el tiempo y la presión, Él también está trabajando de la misma manera en tu vida. —Rick Warren

Disfruta de la presencia del Señor y Él te dará lo que de corazón le pidas (Salmos 37:4)

Echa sobre el Señor tu carga y Él te sustentará.
Él nunca permitirá que el justo sea sacudido (Salmos 55:22)

Echa sobre Jehová tu carga y Él te sustentará (Salmos 55.12)

El ángel de Jehová acampa alrededor de los que le temen, y los defiende (Salmos 34:7)

Él bendice y protege a todos los que corren a Él (Salmos 2:12)

El camino de Dios es perfecto. La promesa del Señor es digna de confianza. Dios protege a cuantos en Él confían. (Salmos 18:30)

El cristianismo es la única religión en el mundo en la que el Dios de un hombre viene y vive dentro de él —Leonard Ravenhill

El estrés hace que creas que todo tiene que pasar ahora mismo.
¡La fe te asegura que todo pasará en el tiempo de Dios!

Él formó el corazón de todos los hijos de los hombres.
Atento está a todas sus obras (Salmos 33:15)

El gigante que está enfrente de ti nunca será más grande
que el Dios que vive dentro de ti —Christine Caine

El justo está confiado como un león (Proverbios 28.1)

El mismo poder que levantó a Cristo de entre los muertos
está dentro de ti (Romanos 8:11)

El pequeño vendrá a ser mil, el menor, un pueblo fuerte.
Cuando sea el momento justo, yo, el Señor, haré que ocurra. (Isaías 60:22)

El que ponga todo en las manos de Dios, eventualmente verá la mano de Dios en todo.

El que tiene su esperanza puesta en Dios y en su palabra, no desespera jamás (Efesios 1:7)

El Señor es bueno. Cuando llegan la angustia y la desesperación él es el mejor refugio. Protege a todos los que en él ponen su confianza; él conoce bien a los que en El se refugian. (Nahúm 1:7)
El Señor peleará por ti: tú solo tienes que estar quieto. (Éxodo 14:14)

Él vendrá a salvar a todos los que esperan en Él (Hebreos 9:28)

En el Libro de los Hechos, la fe para cada creyente era un comienzo, no un fin: era un viaje, no una cama en la que uno se acuesta esperando la victoria de nuestro Señor. El creer no era un acto de una sola ocasión: era más que un acto, era una actitud de corazón y de mente que inspiraba y capacitaba a cada creyente a tomar su cruz y seguir al cordero a dondequiera que fuera. —A.W. Tozar

En la vida de sus hijos, nunca sucederá nada que Dios no pueda solucionar.

En mi angustia, invoqué al Señor y Él me respondió. (Jonás 2:2)

En ti pondrán su confianza los que conocen tu nombre, porque Tú, Oh Señor, no abandonas a los que te buscan (Salmos 9:10)

Enfócate en Cristo, no en la tormenta.

Entrégale tus cargas al Señor y Él cuidará de ti;
no permitirá que los justos tropiecen y caigan.

Humíllense en la presencia del Señor
y El los levantará (Santiago 4:10).

Humíllense, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que Él los exalte cuando fuere tiempo. Echando toda vuestra ansiedad sobre El, porque El tiene cuidado de vosotros. (1 Pedro 5:6-7)

Invócame en el día de la angustia;
yo te libraré y tú me honrarás (Salmos 50:15)

Jamás duerme el que te cuida. Tu Padre sostiene el universo en la palma de sus manos.

Jehová está conmigo como poderoso gigante; por tanto, los que me persiguen tropezarán, y no prevalecerán; serán avergonzados en gran manera, porque no prosperarán; tendrán perpetua confusión que jamás será olvidada.(Jeremías 20:11)

Jehová te guardará de todo mal; Él guardará tu alma (Salmos 121:7)

Jesucristo es el mismo, ayer, y hoy, y por los siglos. (Hebreos 13:8)

José esperó 13 años para ser gobernador de Egipto. Abraham esperó 25 años para ver nacer a Isaac. Jesús esperó 30 años para comenzar su ministerio público. Moisés esperó 40 años para ver la tierra prometida. ¡Nunca dejes de esperar!
Aunque la visión tardará aún por un tiempo, mas se apresura hacia el fin, y no mentirá; aunque tardare, espéralo, porque sin duda vendrá, no tardará. [Habacuc 2:3-4]

La bendición del Señor es un tesoro: nunca viene acompañada de tristeza (Proverbio 10:22)

La Biblia nunca dice "preocúpate", "estrésate", o "entiéndelo por completo", mas una y otra vez nos dice claramente: "Confía en Dios".

La cura perfecta para la preocupación es la confianza en Dios.
La fe de un hombre de confianza es primero probada, antes de ser promovida.

La fe es confiar en Dios, aun cuando no entiendas su plan.
La fe es creer que Dios estaba presente, aun cuando todo lo que escuchemos por ahora sea silencio.

La fe hace que todas las cosas sean posibles... el amor hace que todas las cosas sean más fáciles. —Dwight L. Moody

La fe no hace que las cosas sean fáciles; las hace posibles. [cf. Lucas 1:37]

La fe no puede hacer lo que Dios quiera; pero puede hacer lo que Dios quiere
Leonard Ravenhill

La fe nos dice que no importa lo que esté pasando: Dios tiene el control.

La fe nunca sabe a donde se dirige,
pero ama y dirige a Aquél que está dirigiendo —Oswald Chambers

La fe termina donde la preocupación comienza, y la preocupación termina donde la fe comienza. —George Müller

La incredulidad es en realidad fe pervertida, porque es colocar la fe, no en el Dios viviente, sino en hombre moribundos. —A.W. Tozer

La mano de Dios te sostuvo ayer, te sostiene hoy, y te sostendrá mañana.

La oración es llevar tus deseos y preocupaciones a Dios; la fe es dejarlas allí.

La paciencia significa que debemos confiar en Dios, aunque las circunstancias no hayan cambiado todavía.

La próxima vez que Satanás te recuerde tu pasado, recuérdale su futuro.
La verdad acerca del amor de Dios no es que permita que pasen cosas malas. Es su promesa de que Él estará ahí con nosotros cuando pasen. —Love Comes Softly (2003)

La voluntad de Dios es el lugar más seguro cuando el mundo colapsa.

La voluntad de Dios es siempre muchísimo mayor de lo que nosotros regateamos. Pero debemos creer que, sea lo que sea que involucre, es aceptable y perfecta —Jim Elliot

Las promesas de Dios: Dios las hizo, la fe las cree,
la esperanza las anticipa, la paciencia las aguarda.

Lo que Dios quiere hacer contigo, lo hará por encima de la opinión de todos los que te han criticado.

Lo que Dios te ha prometido, tus ojos lo verá (Salmos 33:4)

Lo que hoy es tu prueba más grande, mañana será tu testimonio más impresionante.

Los desastres son como alarmas de reloj en el mundo, por tanto Dios los permite. Nos gritan "¡Despierten! ¡Amen! ¡Oren! ? —Criss Jami

Los leoncillos pasan necesidad y tienen hambre, mas los que buscan al Señor no carecerán de bien alguno (Salmo 34:10)

Los que confían en el Señor, siempre tendrán nuevas fuerzas [cf. Isaías 40:31]

Los que miran al Señor quedan radiantes de alegría y jamás se verán defraudados (Salmo 34:5)

Mantén tu mirada fija en Jesús, y caminarás por encima de toda ola de preocupación.

Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió (Hebreos 10:23)

Mi ayuda viene del Señor, quien hizo los cielos y la tierra (Salmos 121:2)

Mi carne y mi corazón pueden desfallecer, Pero Dios es la fortaleza de mi corazón y mi porción para siempre. (Salmos 73:26)

Nuestro Dios es más grande que cualquier problema que podamos llegar a enfrentar.

Mi futuro es desconocido para mí, pero está en las manos de un Dios que todo lo sabe.

Mi Señor no está limitado. Él volverá a proveer de nuevo. —George Müller

Mientras la incredulidad se enfoca en las dificultades, la fe se enfoca en Dios —J. Hudson Taylor

Mientras tengas presente que Dios está contigo, no importa quién esté contra ti.

Muchas veces, lo que creemos que está más lejos, es lo que más cerca está.

Nadie busca a Dios sin antes haber sido hallado por Él. Su búsqueda comienza porque Dios ya lo trae de la mano.
A.W. Tozer

No eres falto de amor: eres alguien por quien morir.

No eres indeseado: eres escogido.

No es mi habilidad, sino mi respuesta a la habilidad de Dios lo que cuenta — Corrie ten Boom

No estás solo: eres Suyo.

No importa qué tan oscura se ponga la vida. Dios siempre seguirá iluminando nuestro camino.

No le digas a Dios que tienes una problema.
Dile al problema que tienes un gran Dios.

No moriré sino que viviré, y contaré las obras del Señor
(Salmos 118:17)

No se acuérdense de las cosas pasadas, ni traigan a memoria las cosas antiguas. He aquí que yo hago cosa nueva; pronto saldrá a luz. ¿No lo perciben? Otra vez abriré camino en el desierto, y ríos en la soledad (Isaías 43:18-19)

No se entristezcan,
porque el gozo de Jehová es vuestra fortaleza (Nehemías 8:10).

No seré el dueño del mundo... pero soy hijo del dueño.

No son los grandes hombres los que transforman el mundo, sin los débiles y pequeños en las manos de un Dios grande
J. Hudson Taylor

No te de por vencido con Dios,
porque Él no se da por vencido contigo. Ed Cole

No tengas fe en tu propia fe; ten fe en la fidelidad de Dios.

No tengas miedo, porque yo estoy contigo (Isaías 43:5)

No tengo temor del mañana porque sé que Dios ya está ahí.

No uses tu energía para preocuparte,
usa tus fuerzas para creerle a Dios.

Nosotros no somos de los que retroceden (Hebreos 10:39)

Nuestro Padre celestial nunca le quita nada a sus hijos, a menos que esté pensando en darles algo mejor. —George Müller

Nunca tenemos la necesidad de gritar en el espacio en busca de un Dios ausente. Él está más cerca que nuestra propia alma, más cerca que nuestros más secretos pensamientos — A.W. Tozer

Nunca tengas miedo de confiar un futuro desconocido
a un Dios que ya conoces —Corrie ten Boom

O confiamos en Dios, y en ese caso no confiamos en nosotros mismos ni en la gente a nuestro alrededor, ni en las circunstancias ni en ninguna otra cosa, o confiamos en una o más de estas cosas y no confiamos en Dios. —George Müller

Pon tu mira en los gigantes, y tropezarás; pon tu mira en Dios, y tus gigantes serán derrocados.

Pon tu vida en sus manos, confía plenamente en Él y Él actuará a tu favor (Salmos 37:5)

Por eso les digo: Crean que ya han recibido todo lo que estén pidiendo en oración, y lo obtendrán (Marcos 11:24).

Por lo cual puede también salvar perpetuamente a los que, por él, se acercan a Dios, viviendo siempre para interceder por ellos (Hebreos 7.25)

Por tanto, el Señor espera para tener piedad de vosotros. Y por eso se levantará para tener compasión de vosotros. Porque el Señor es un Dios de justicia. ¡Cuán bienaventurados son todos los que en Él esperan! (Isaías 30:18)

Porque no es vuestra la guerra, sino de Dios (2 Crónicas 20:15)

Porque tú, Señor, eres bueno y perdonador, y grande en misericordia para con todos los que te invocan (Salmos 86:5)

Puede que David no haya tenido mucho en sus manos cuando enfrentó a su gigante, pero Él tenía FE en un Dios que podía derrotar al gigante.

Pues tú, SEÑOR, bendices al que te obedece, como un escudo lo cubres con tu favor. (Salmos 5:12)
Quizás no seas elegido por el mundo, pero eres elegido por Dios y eso es todo lo que cuenta.

Refrescaré a los cansados y saciaré a toda alma entristecida (Jeremías 31:25)

Sé que tu amor durará por siempre; que tu fidelidad es tan permanente como el cielo (Salmos 89:2)

Si aún tienes algo que dar, aún hay tienes que intentar; nada se termina sino hasta el momento en que dejas de intentar.
Si crees en un Dios que controla las grandes cosas, tienes que creer en un Dios que controla las cosas chiquitas. Somos nosotros, claro, los que las hacemos parecer chiquitas o grandes —Elisabeth Elliot

Si lo que está por venir te atemoriza y lo que está detrás de ti te hiere, sólo mira hacia arriba. Él nunca te fallará.

"Si mi pueblo, que lleva mi nombre, se humilla y ora y me busca y abandona su mala conducta, yo lo escucharé desde el cielo, perdonaré su pecado y restauraré su tierra" (2 Crónicas 7:14)

Si necesitáramos alguna especie de "señal" o "prueba" para nuestra creencia en Dios, entonces creeríamos o pondríamos nuestra confianza, no en Dios, sino en la señal o en la prueba
Robert L. Short

Si tú quieres caminar con Él y verlo a Él, y esperas ayuda de Él, ten la certeza de que Él JAMÁS te fallará. —George Müller

Solo debes dar un paso de fe. Dios se encargará de lo demás.
[cf. Hebreos 11:6]

Su sangre fue derramada para que puedas tener vida
(Romanos 5:8-11)

Te puedes preocupar o puedes confiar en Dios. No puedes hacer las dos cosas a la vez. ¡Confía en el Señor con todo tu corazón
Toda palabra de Dios es limpia: Es escudo a los que en él esperan. (Proverbios 30:5)

Todo parece imposible hasta que comenzamos a confiar a Dios.
Todos los gigantes de la fe en Dios han sido hombres y mujeres débiles que hicieron grandes cosas para Dios porque creyeron que Él estaría con ellos — J. Huson Taylor

Tu guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento persevera en ti; porque en ti ha confiado (Isaías 26.3)

Un poquito de fe hará que tu alma sea llevada al cielo, pero una buena dosis de fe hará que el cielo sea llevado a tu alma.
D.L. Moody

Vivimos por fe, no por vista. Así que no es que vayas a creer por ver milagros. Verás milagros porque crees.

Vuélvenos, oh Jehová, a ti, y nos volveremos; renueva nuestros días como al principio (Lamentaciones 5:21)

Y esta es la confianza que tenemos en Él: que si pedimos alguna cosa conforme a Su voluntad, Él nos oye (1 Juan 5:14)

Yo no te olvidaré; he escrito tu nombre en las palmas de mis manos (Isaías 49:15-16)

Yo sé el final de la historia: saldré del desierto, apoyado por mi Amado. —Jon Thurlow

Yo sé en quién en confiado y estoy seguro que Él es poderoso para guardar lo que le he confiado (2 Timoteo 1:12)

Yo te he formado. Yo te llevaré; Yo te sostendré y yo te rescataré (Isaías 46:4)


Yo te pido que seas fuerte y valiente, que no te desanimes ni tengas miedo, porque yo soy tu Dios, y te ayudaré por donde quiera que vayas (Josué 1:9)