miércoles, 9 de mayo de 2018

Iglesianismo VS. Cristianismo


Enseñanzas de la religión:
Iglesianismo de la cristiandad
Enseñanzas del Nuevo Testamento:
Cristianismo de Cristo
Estructura y conformación interna
La iglesia es vista como una organización, una agrupación o institución religiosa que hace actividades religiosas. El templo es visto como un edificio o lugar santo que funciona casa de Dios. Es vista como un lugar al que se tiene que ir los domingos para quedarse sentados y callados escuchando un sermón.
La iglesia es percibida como el cuerpo espiritual de Cristo, conformado por cada uno de los que en verdad creen en Él en todo el mundo. Nosotros somos el templo de Dios, somos un templo hecho con piedras vivientes y su Espíritu mora dentro de nosotros porque Él no habita en templos hechos por las manos del hombre.
El sacerdocio es exclusivo del pastor, obispo, presbítero o pastor, gente especial que funge como cabeza de la iglesia e intermediarios entre Cristo y el hombre. Ellos tienen prevalencia y ciertos privilegios porque han recibido adoctrinamiento en un seminario o han sido educados. Necesitan ser ordenados por otro ministro. Ellos son los que toman las decisiones, los que están aptos para predicar o hacer llamados a la congregación. Ellos son los que realizan los bautizos, la comunión, la expulsión de demonios. Sólo suele haber un líder principal, que otorga permisos y a veces delega funciones a otros cercanos a su jerarquía. Sólo unos cuanto pueden tener este papel.
El sacerdocio de todos los creyentes es una creencia fundamental. Todos los creyentes son hechos sacerdotes y hay una pluralidad de líderes. Todos están llamados a ser ministros (servidores). Jesús es el Pastor de todos y el único intermediario entre Dios y los hombres. Cristo es la única cabeza de todos y las decisiones son tomadas por medio de concilios con base en las enseñanzas de Cristo. El Espíritu Santo enseña a todos personalmente, y no hay necesidad de enseñanza humana extrabíblica. Todos los creyentes puede predicar a Cristo ante el mundo, todo pueden bautizar a nuevos creyentes o echar fuera demonios en el nombre de Jesucristo.
Se debe tener fe en los líderes de la iglesia y en la propia denominación. Se les considera los indicados para llevarnos al camino de Dios y los congregantes siempre deben someterse a los pastores incuestionablemente.
Sólamente se tiene fe en Cristo, el único camino que nos puede llevar a Dios y el único que es la cabeza de la iglesia. No se puede confiar en los hombres y los líderes siempre deben someterse a las enseñanzas de Cristo (Ef. 2:8-9, Ro. 5:1-2)
El liderazgo de la iglesia es visto como una posición de autoridad y superioridad eclesiástica. Los líderes son vistos como los que toman las decisiones y los que dicen a los congregantes qué hacer o no hacer. Los congregantes deben servir a los líderes y su veracidad no puede ser puesta en tela juicio.
El liderazgo es visto como una función donde se busca incentivar el compañerismo, la comunión y el orden. La autoridad de Cristo siempre es por encima de los líderes. Todos, incluyendo ellos, deben someterse y acoplarse a las enseñanzas de Jesucristo, siendo humildes y sirviendo unos a otros. Sus enseñanzas deben examinarse a la luz de las Escrituras para verificar que sean verdaderas.
Enseña que no es bueno cuestionar a los líderes, a sus enseñanzas, su integridad, su estilo de vida, o demás.
Promueve el cuestionamiento del hombre la examinación de todos lo espíritu, para ver si es de Dios y checar si es conforme a las Escrituras.
La identidad de los líderes se encuentra en las posiciones ministeriales que desempeñan (pastor, obispo, sacerdote, presbítero, diácono, evangelista, apóstol, predicador, misionero, maestro, líder de alabanza, etc). Son puestos en un pedestal y se les da preminencia por encima de los demás creyentes y cuentan con una posición única que sólo corresponde a ellos.
Las funciones de servicio indicadas en Efesios 4:11 son llevadas a cabo por hombres cuya mención se hace en letras minúsculas. Nadie está por encima de nadie, sino que todos son servidores mutuos de todos. Su propósito es equiparar a otros santos para que los demás discípulos aprendan a hacer lo mismo que ellos ha aprendido a hacer; en esto consiste la edificación del cuerpo de Cristo.
Los miembros de la iglesia son los que se han registrado, los que se han hecho miembros oficiales o los asistentes regulares de la misma.
Los miembros de la iglesia son todos aquellos en el mundo que han nacido de nuevo y siguen a Cristo en verdad (Ef. 5:30, 1 Cor. 12:13-27)
La membresía es vista como una prueba de compromiso para tener una asistencia regular y de hacer las cosas que los demás hacen en la misma denominación. Su enfoque es mantener la tradición y las cosas tal y como están.
Todos los que siguen a Cristo se ven entre sí como hermanos de una misma familia, nacida de nuevo, como llevada por el viento. Su enfoque colectivo es madurar juntos, ayudarse, hacer discípulos y poner la palabra en práctica.
Se consideran conversos los que han hecho la oración del pecador o respondido a un llamado del altar. Se considera cristianos a todos los que con sus labios profesan creer en Jesucristo. Se consideran hermanos todos aquellos que se han hecho miembros de la iglesia. Se considera que quienes predican de forma maravillosa o hacen señales milagrosas son verdaderos cristianos.
Se consideran conversos aquellos cuya conversión ha sido bíblica y completa a través de arrepentimiento, confesión de pecado, confesión de fe, y bautismo. Se cuestiona la veracidad de aquellos cuya profesión de creencia demuestra incongruencia entre su forma de vivir y la fe en Jesucristo, a pesar de que su ministerio parezca impresionar a la gente.
Hay una cobertura denominacional: los líderes deben someterse y rendir cuentas a los líderes mayores de su denominación.
Hay una cobertura celestial: la sumisión y el rendimiento de cuentas se hace directamente a Dios, quien reprende y castiga a quienes caen en el error.
Funcionamiento y comportamiento
La vida espiritual gira en torno a las actividades que se realizan dentro de la iglesia y el culto dominical.
La vida espiritual gira en torno a conocer a Dios a través de Jesucristo; esto debe hacerse en todo tiempo y lugar.
La agenda principal es el culto o serrvicio dominical: un momento especial, en un día especial, con una alabanza especial que consiste en música. El momento clave es sentarse a escuchar el sermón de los pastores.
La reunión de cristianos consiste en vivir el discípulado; todos los días son igual de santos, la alabanza se hace diario, siempre se habla de Jesús a otros y se busca cumplir la comisión de hacer más discípulos. El momento clave es poner en práctica la Palabra.
Define la comunión en congregación como un acto simbólico que ocurre automáticamente al asistir regularmente los domingos a la iglesia.
La comunión en congregación se define en términos de “donde hay 2 o 3 reunidos en mi nombre”, sin importar el día, momento o lugar.
Servir consiste en tener un “ministerio” en la iglesia local, y estar haciendo cosas dentro de la iglesia: culto dominical, oración exhibicionista, reuniones tipo club social para hombres, mujeres o jóvenes; conferencias, estudios bíblicos, grupos de alabanza, ensayos, control de funciones técnicas, mercadería de “talentos” o venta de comida, venta de libros, limpiar o barrer, poner o quitar sillas, cuidar los coches, recibir a los visitantes en la puerta, etc.
Servir consiste en obedecer las enseñanzas de Jesucristo, en hablar a otros de Jesús, en tener una vida de sacrificio vivo para Dios y en llevar una vida de servicio para Dios, donde los creyentes actúan como manos y pies de Jesús en todo lugar.
La identidad del creyente radica en ser miembro de la denominación.
La identidad del creyente se halla sólo como hijo de Dios y seguidor de Jesucristo (1 Jn. 3:1-3, Gál. 2:20, 1 Cor. 3)
La iglesia adquiere una prioridad por encima de los miembros de la familia.
Aquellos que no proveen para su propia familia son considerados peor que incrédulos.
Se acerca a Jesús en busca de riquezas, éxito, prosperidad, felicidad y una vida realizada con los sueños propios.
Se acerca a Jesús para encontrar libertad, sanidad, perdón de pecados, vida eterna, gozo y verdadera paz.
Cada domingo, los congregantes deben dar el diezmo a los líderes de la iglesia local: el 10% de sus ganacias económicas e ingresos para que se puedan continuar las actividades.
Se espera que, según la posibilidad de cada uno, se aporte una ofrenda voluntaria atendiendo las necesidades de todos, y especialmente de los que menos tienen (2 Cor. 9:7)
El dinero donado es usado para mantener altos gastos de la iglesia o pagar salarios abundantes, dejando poco para las necesidades de las ovejas.
Las necesidades y la provisión de todos los creyentes debe de buscarse, incluso si eso significa vender posesiones para lograr la equidad.
Hace oraciones en vez de ofrecer las cosas que otros hermanos necesitan.
Hace oraciones y busca la manera de ofrecer las cosas que otros hermanos necesitan.
Se cree los líderes tienen una unción superior y que pueden impartir la unción. Se piensa que la unción viene de afuera y que es necesario asisitir a eventos para aumentarla porque no todos tienen la misma cantidad de unción.
Todos los creyentes tienen la misma unción del Espíritu Santo. La unción ha sido dada por completo a todos los que han nacido de nuevo y Dios ha repartido distintos dones espirituales que tienen la misma importancia (Ef. 4:11)
Se siguen rígidas reglas y regulaciones religiosas, al mismo tiempo que hay pecado e hipocresía.
Se vive en la libertad ofrecida en Cristo haciendo las cosas a su manera, mantenienddo santidad, sinceridad y congruencia.
Se ofrece ayuda, provisión, servicio o favoritismo a los que son miembros oficiales o registrados.
Se ofrece ayuda, provisión y servicio a todos los creyentes (Mt. 25:33-46, Hch. 2:44-46)
Se edifica una religión y se hace un énfasis continuo en el crecimiento o la mejora del edificio de reunión.
Se edifica el alma y se hace un énfasis continuo en el Reino de los Cielos.
El evangelismo y crecimiento de la iglesia se logra al invitar e insistir a los amigos, familiaries o conocidos a que visiten la iglesia.
El evangelismo y crecimiento se logra al salir a practicar y predicar el evangelio a los incrédulos de afuera (Mc. 16:15-16, 1Cor. 15:1, Ro. 10)
Se suele estresar que la asistencia frecuente a la iglesia, la lectura o el conocimiento de la Biblia son evidencias del verdadero crecimiento espiritual.
Se enfoca en la práctica de las Escrituras, los buenos frutos del Espíritu Santo, y el carácter cristiano como evidencias del crecimiento espiritual (2 Tim. 2:15, 3:16-17; Gál. 5:22-23)
Pasa más tiempo en actividades de la iglesia de tipo emocional, motivacional, social o de entretenimiento, que en práctica del Evangelio y oración íntima con Dios.
Pasa más tiempo en oración íntima con Dios y evita participar en actividades vanas que siguen las costumbres del mundo.
Se enseña que quienes no siempre asisten a la iglesia no tienen alimentación espiritual.
Se enseña que quienes no se alimentan de la palabra de Dios no tienen alimentación espiritual.
Considera que un gran número de asistentes es sinónimo de reavivamiento o crecimiento en los últimos días. Cree que quienes atraen a más personas a la iglesia, quienes llevan una vida éxitosa o hacen señales milagrosas son más maduros que los demás.
Relaciona el alto número de falsas conversiones como una señal de apostasía en los últimos días. Reconoce que ni la prominencia, ni el éxito ni los milagros son pruebas de una vida a cuentas con Dios.
Etiqueta a los que ya no asisten a la iglesia local como creyentes tibios, reincidentes en pecado o individuos que nunca fueron creyentes.
Sale de las iglesias que están basadas en un sistema apóstata o que se ha desviado de los fundamentos establecidos por Cristo y los apóstoles.
Enseñanzas y creencias
Predica un mensaje atractivo y centrado en el hombre que no enseña acerca del pecado, el infierno, el juicio final, el arrepentimiento, o la ira de Dios. Prefiere entretener y dar mensajes de éxito personal que evita toda negatividad y procura la mejora de la posición terrenal.
Predica el Evangelio equilibradamente y sin censura; tal y como es. Enfatiza lo que se enfatiza en el Nuevo Testamento, y no enfatiza lo que tampoco se enfatiza en el mismo. Transmite la verdad bíblica, sea suave o dura, sin importar los tintes de positivismo o negatividad.
Énfasis en aportaciones económicas, en seguir a los líderes, en someterse a los pastores, en favorecer las propias preferencias doctrinales incuestionablemente y seguir las tradiciones de la misma denominación.
Énfasis en hacer la voluntad de Dios, en imitar a Cristo y seguir sus enseñanzas, en ser discípulos de Cristo y hacer las cosas a su manera y cuestionar al hombre, perseverando en la doctrina de los apóstoles.
Hay una dogmatización de tradiciones y costumbres y un absolutismo sobre las propias interpretaciones teológicas, aunque no sean claras en la Biblia. Se escogen algunos versículos que se amoldan a su postura y se desechan u omiten los que parecen no encajar en su teología.
Hay un equilibrio doctrinal y una consideración cuidadosa, sistemática, sana e imparcial de los asuntos que suelen ser de difícil interpretación. Hay un estudio expositivo de los diversos versículos bíblicos y humildad a la hora de estudiar la Biblia.
Busca primero el cumplimiento de los estándares de la iglesia y sus políticas.
Busca primero el cumplimiento de los estándares de Jesucristo y su Reino.
Usa la “imperfección” como excusa para aceptar falsas doctrinas y falsos maestros.
No acepta de ninguna manera las prácticas erróneas o la doctrina falsa.
Se suele creer que no hay salvación fuera de la iglesia o denominación, pues se piensa que la propia es la única verdadera.
No hay salvación fuera de Jesucristo. Se advierten de los pelígros doctrinales , pero no se condena a personajes sin oportunidad de arrepentimiento.
Evita tener relación o comunión espiritual externa con miembros de otras iglesias cristianas o denominaciones.
Evita tener relación o comunión espiritual con personas apóstatas, ya sea dentro o fuera de las iglesias.
Considera la exclusión de la iglesia como algo falto de amor: le da la bienvenida a miembros heréticos que influyen en otros por medio de enseñanzas falsas.
Echa fuera a los heréticos o a los que no se quieren arrepentir de sus pecados; protege al rebaño de la influencia de doctrinas peligrosas.
Basa su punto de vista con base en sermones y enseñanzas de los líderes religiosos o históricos.
Basa su punto de vista en base a la Biblia solamente, “comparando lo espiritual con lo espirital”
Se forma una teología basada en la propia experiencia o falta de experiencia.
La Biblia es entendida en base a lo que está escrito, sin importar si nuestra experiencia no encaja 100%.

No hay comentarios:

Publicar un comentario